domingo, 28 de febrero de 2010

¡Fuerza Chile!

El día después del terremoto, otro seísmo de más de seis puntos. En verdad, Chile vive habituada al bamboleo constante, pero esta vez fue en serio, dicen que el terremoto más grave de la historia. ¡Fuerza Chile!
Recuerdos para las víctimas, ya van más de 400, y mucho ánimo a todos los chilenos del mundo. Los chilenos son gente dulce por fuera y dura por dentro, capaces de levantarse hasta mil veces y de batirse el cobre, nunca mejor dicho. Nos cuentan historias tremendas, unas horribles y otras tamizadas por el peculiar sentido del humor andino. Pudo ser mucho peor. Las construcciones resistieron, pero algunos pueblos cercanos a Constitución desaparecieron, literalmente, engullidos por la marea.
Observen al Chupete Suazo dedicando a Chile su primer gol de ayer, el tipo salió encorajinao y a los dos minutos ya había anotado un tanto, en nombre de la cordillera.
Ahora más que nunca, a la familia y a los amigos: ¡Salud, huevones!

Canciones para la tormenta imperfecta

La borrasca de amor, la tormenta imperfecta, el dolor público, la ironía al cuadrado y un montón de cómplices. Quién sabe lo que deparará el pasado. "Tú sabías que aquello no saldría bien, y aun así te metiste de lleno". Quique González colma Mucho Teatro de sensaciones paradójicas, sorprende con un repertorio insospechado, trufado de grandes éxitos, nuevos clásicos y más de una joya. La gente canta. La luna sonríe debajo del brazo del cantautor eléctrico, que mejora las prestaciones de su banda a medida qiue avanza la gira de Daiquiri Blues. Mucho mejor que en Sevilla, merced al retorno del guitarrista Javi Pedreira, aunque igual de emotivo, el concierto portuense confirma a González en el ruedo ibérico de la inspiración y las agallas. El artista, siempre en el alambre, muestra sus lados sensible, feroz y frágil, y el público apura dos horas memorables.
Cuando el dinero es el rey y ella un misterio, "tiramos de lo que perdemos, perdemos lo que más queremos, tenemos lo que nos merecemos". Quique da su merecido al personal sin apenas concesiones. No toca "Camisetas mojadas", pero deja traslucir varios clásicos en crecimiento, las nuevas canciones hacen la primera comunión de aquella manera, media docena de melodías de Daiquiri Blues merece el reconocimiento inmediato, y algunas de ellas, como la sensacional "Su día libre", ocupan ya lugar preponderante en el listado de temas más deseados. Quique, firma una historia redonda, la chica rubia carga el rifle en el bar, el protagonista la lleva a cenar a un lugar horrible, en su día libre, y al final el cantante confiesa que mañana vuelve a tocar en alguna parte y necesita entrar en los sueños de alguien. Sin compromisos. Sin esperanzas vanas. Al loro de la desazón, pues en otro pasaje de la película el autor recuerda que ella estuvo ayer por aquí, la idea le ronda la cabeza, la obsesión le invita a subir y bajar Gran Vía como un policía local. "Quise mucho a esa chica, pero espero que no vuelva nunca más". Negación extrema del olvido. Historias de perdedores, arriba la melancolía, fuera eufemismos, Quique ensaya la canción perfecta en plena tormenta de nada. Y recupera "Hotel solitarios" para desvelar que de chaval trabajó en una cadena de restaurantes de comida americana, el gerente leía libros de autoestima, cómo ser un líder, "y desde entonces le perdí el respeto". La noche de Navidad, su día libre, el cabrón del gerente esperó a los trabajadores oculto bajo su coche, para prevenir escaqueos. En cambio, el cantante no elude piezas del ayer, desde "Salitre" a "Kamikaces enamorados", pasando por "Pequeño rocanrol" y "Hay partida", y rescata otra pieza clave, la encantadora y desarreglada "Crece la hierba", que también cobra nueva vida. El cantante vence su timidez con doble sentido, juegos de palabras, una curiosa imitación de la voz de Van Morrison o un guiño a Lou Reed por el lado salvaje de la existencia. Y rinde tributo al gran José Ignacio Lapido, de quien interpreta una desnuda y brillante "Algo me aleja de ti". Festín de guitarras, órgano Hammond, alguna visita ocasional de Quique al piano y la canción de El Puerto de Santa María. Quique González ya es un clásico.

Febrero 10, Cultura, Diario de Cádiz

De Chicago a El Puerto, puro blues

Noche de blues en la fiesta de Andalucía. Uno de los máximos exponentes del blues de Chicago, Eddie Campbell, actúa en la sala Milwaukee. Gran expectación. Del West Side a la Bajamar del Guadalete. Con fama de mujeriego y vividor, un pedazo de músico nacido a la vera del Missisipi y que siempre quiso ser como Muddy Waters, el ídolo de su madre. Hasta que logró tocar con él a la imberbe edad de doce años.
Cuentan que en los años cincuenta, Campbell y su banda realizaban actuaciones prodigiosas, que Eddie era un showman en escena y que además destacaba su afición por el karate y las motos. Lástima que Eddie no se encontraba en el sitio y el momento oportuno cuando el blues obtuvo un masivo reconocimiento y los cazatalentos pescaban los mejores ejemplares en la ciudad del viento, Chicago, para "venderlos" en el mercado negro y en los círculos blancos de rocanrol, no en vano los grandes rockeros blancos de los años sesenta impulsaron el renacimiento del blues, sobre todo en Inglaterra, de manera crucial.
Dicen que Campbell perdió varias oportunidades de lanzarse en solitario en los Usa, hasta que su destino giró de nuevo y cosechó un éxito morrocotudo, y el refrendo general, con el disco "King of the jugle", en 1977. Luego, el cantante y guitarrista fijó su residencia en Europa, donde cuenta con notable prestigio, en especial Holanda. En los años noventa retornó a Estados Unidos.
Eddie Campbell, que combina el blues con el funky o el gospel con sublime maestría, aprendió a tocar blues de la mano de Magic Sam y Otis Rush, ha tocado con Howlin Wolf, Little Walter, y Jimmy Reed, fue reclutado por Willie Dixon para integrar el Chicago Blues All Stars. A nadie deja indiferente su manera de tratar a la guitarra eléctrica.

Febrero 10, Cultura, Diario de Cádiz

sábado, 27 de febrero de 2010

Chile resiste el atroz terremoto

Chile nos levantó de la cama con el corazón en un puño. Un terremoto atroz, peor que el de Haití, ha dejado ya casi un centenar de muertos, menos mal que el país andino, suficientemente preparado para los movimientos sísmicos, ha resistido con entereza. De todos modos, zonas del centro y del sur, con epicentro en Concepción, pasan horas de angustia y desazón. No recuerdan algo parecido desde el 85 y el 60, los chilenos disponen, por fuerza mayor, de una extraña y amplia cultura del terremoto. Pa que aprendan los expertos en alarmas infundadas, gripes a, alertas amarillas, naranjas o verde fosforito y demás pamplinas de los nuevos ricos europeos, que al primer peo se cagan de miedo. Chile resiste, qué alivio, pero sufre de veras. Cariños desde el otro lado del charco.

La síntesis de Cádiz

El presidente del Pentágono del Carnaval no desea que el Doce se convierta en "una fecha para maldecir". Miguel Villanueva se moja, como las coplas más comprometidas con el medio ambiente, que esta semana se han empapado en el estricto sentido del término. Agua. Doce. Ilusiones y realidades. Como cabeza visible de la Asociación de Autores de Carnaval, este profesor, estudioso de la fiesta, alma mater de los míticos Dedócratas y mil cosas más, lamenta que las entidades implicadas en el Bicentenario aún no han contado con las voces creativas de la fiesta genuina de Cádiz, reducto verdadero de la libertad de expresión, heredera del espíritu presuntamente tolerante y abierto del Cádiz de las Cortes, nada que ver con el Cádiz de los Cortes de carretera y de luz. "No nos han llamado. Sé que la alcaldesa tiene mucho interés en guardar buena relación con nosotros, pero prescindir de los representantes del Carnaval, o ignorarlos, o no sacar rendimiento de un buen entendimiento mutuo, significaría un error gordísimo o una evidente falta de audacia o de tacto. Hablamos en nombre de 353 afiliados gaditanos, en nombre de la creatividad", sugiere Villanueva. Al otro lado, los del Consorcio "sólo han contado con nosotros una vez y poco más". Pregunta al aire el presidente de los autores: "Hasta ahora, ¿qué han aportado los miembros natos del Doce?"
Del Museo del Carnaval, ná de ná, unas cuantas prisas al cabo de siglo y medio y toda la pinta en convertirse en el Museo del Ná, célebre en Cádiz por su inmenso vacío existencial. "No sólo hace falta dinero, el contenido del Museo depende de nosotros, que estamos dispuestos a contribuir", pero de momento, ná de ná.
Los Autores pretenden organizar un gran Congreso de Carnaval, de ámbito latinoamericano, durante los fastos del Doce. La asamblea lo decidirá, un dedócrata como Villanueva lo antepone todo a la decisión del colectivo. Y advierte que "si los políticos de ambos signos no cuentan con nosotros, será una cosa del género tonto". Y se decide a plasmar unas cuantas consideraciones personales en torno a la conmemoración de La Pepa. "Que no se convierta en una fecha maldita, que no sirva para estropearnos la ciudad de Cádiz. El Castillo de San Sebastián no se puede alterar de cualquier manera, ni su estructura, ni su valor ecológico, ni el encanto de La Caleta". Con La Caleta hemos topado. "No se vayan a equivocar", tercia Villanueva en torno a algunos de los proyectos vinculados con el Doce, el fin del mundo. "Todo el mundo quiere el nuevo puente, pero si no se perjudica al peatón con otros proyectos como el tranvía hasta el casco antiguo. El tranvía debe quedarse en la Renfe, como máximo. Costó mucho trabajo quitar el tranvía en años pretéritos, más vale no recordar los peligros y las molestias que entrañaba. No me opongo al tranvía por la Bahía, pero sí al tranvía interior. Aquí todo el mundo quiere jugar a costa de Cádiz. Con lo bien que se llega a todas partes caminando, por la parte de intramuros". Villanueva, de todas formas, sospecha que algunos proyectos cruzados y entreverados se presentan o se rechazan con tal de "molestar al adversario político".
Para relajar un poco la cosa, mejor echarse un cantecito por infraestructuras. Villanueva se las sabe todas, las coplas del pasado siglo, y rememora un par de letras jugosas. Cañamaque escribió un pasodoble en los años veinte en torno al tranvía, algo así como "vaya un equipito que tenemos aquí, que la vía del tranvía no la quita ni pa Dios". Y el mismísimo Paco Alba fue precursor del soterramiento, apostó en un popurrí por trazar "las vías del tren cerca de Puntales, donde el puente, e irá una gran avenida en vez de un pedregal". Coplas para ver llover sobre mojado.
Los Autores del Carnaval gaditano se anticiparon al Doce hace tiempo, cruzaron el charco, se hermanaron con el fraternal Carnaval de Montevideo, con la mexicana Veracruz, con Tenerife y Huelva, con Cuba y pronto con Barranquilla. "Fuimos por delante de los políticos", igual que la comparsa Araka La Kana, de Juan Carlos Aragón, cantó por delante del acento ríoplatense y estrechó lazos de unión. Hasta el Diario Oficial uruguayo, el Boea de aquellas tierras, presenta este mes una foto de Julio González en su portada. De ahí que Villanueva considere que "hay que contar con todos los estamentos gaditanos con suficiente peso cultural de cara al Doce; ya que hemos llegado hasta aquí, que sea un éxito y tenga prolongación en años sucesivos". El Doce más Uno y siguientes, si no triunfa la profecía.
Libertad de expresión de boquilla. "Hay mucha libertad de expresión de mentirijilla" en la cuna de la libertad condicional. "No sólo tiene derecho el periodismo a practicarla", indica Villanueva. "Hay que practicarla a diario, escribiendo y escuchando". Hay que ganársela a diario. Lástima que muchos predicadores compren ahora baratito los silencios con cuotas de chunga vanidad. Libertad, es verdad, la libertad de La Pepa y compañía. La libertad de equivocarse, la libertad libremente entendida, "el candado mohoso de mi amigo Luis Quintero, que además fue alumno mío y es un tío puntero, no pega ni con cola junto a la plaza España", opina Miguel en torno a la imagen nada dieciochesca impuesta en las calles gaditanas. Cree que el gorrión de Puertatierra no se ha valorado en su justa medida, y a vueltas con la libertad de expresión, consagrada en la Constitución de Cádiz, sostiene que se habla de ella a conveniencia, se secuestra en otras ocasiones a capricho o se cercena con excusas. "El pueblo por un lado y los políticos por otro". Bonito lema pal Doce y consecutivos. "Lo importante es lo que se dice, no quién lo dice". Equiricuá.
Villanueva ha analizado las letras del Carnaval gaditano hasta de canto, así que nadie como él para fijar la relación del Carnaval con el espíritu del Doce. "No hay ciudad más española que Cádiz", rubrica. "Cádiz siempre ha sido la síntesis de todas las Españas posibles, el amor a la patria muestra aquí todos los colores. La Pepa ha quedado tan impregnada a los gaditanos que las letras del Carnaval aún rezuman españolismo puro hasta en el caso de los autores más ácratas y rebeldes. No se menosprecia a vascos y catalanes, qué va. Aquí los vascos siempre han contado con mucho cariño y aprecio, no en vano levantaron los astilleros. Aquí se canta a la unión de España por puro amor al terruño, a la patria chica, y a la grande. Ha ocurrido en todas las épocas, y no sólo en los años del franquismo. Las letras del Carnaval guardan auténticos tesoros y muestran la posición del gaditano ante el mundo". Villanueva recuerda ahora "las letras de la dictadura de Primo de Rivera, que eran muy fuertes, como aquella copla en la que se decía, sin vergüenza de ser español, que iban a los toros de El Puerto mientras corría sangre española por los campos de Melilla". A veces, estribillos, latiguillos, frases hechas o subrayados vocales se utilizan como recurso para enganchar al público, y las letras admiten varias interpretaciones según la calidad de la intercomunicación, admiten susceptibilidades, filias y fobias, y recuérdese que se escriben para ser cantadas y escuchadas en un contexto determinado". A veces acusamos a ciertos letristas de pecados propios y vergüenzas ajenas.
Mucho rollazo histórico con el Doce, muchos mitos y leyendas, pero la Constitución de Cádiz de 1812, remarca Villanueva, "no fue capaz de abolir la esclavitud, por ejemplo, ni concedió derechos fundamentales a la mujer", por citar un par de avances aún lejanos en el tiempo. "Se avanzó mucho, cierto es, perola esclavitud no desapareció hasta finalizada la guerra de Cuba, aquí en Cádiz, durante el Doce, vivían más de dos mil esclavos, que servían en casa privadas, para la iglesia o los militares".
Llega "la excusa del Doce, como fue la Expo 92, aunque con la mala fortuna de la crisis económica y de que llegamos tarde, sin planificación política ni excelentes miras, pero ojalá todo salga bien. Me conformo con que Cádiz cuente con el segundo puente, el Ave o lo que se le parezca, un lavado de cara de la ciudad y algo más. Pero como no se pongan al día ... "vamoavé".
La conversación deriva a lo puramente carnavalesco, si doña Cuaresma lo permite, y Villanueva ahonda en el doble sentido, el espíritu "educado y respetuoso" del público gaditano y también en el peculiar cambio de humor de esta tierra, que puede levantar o hundir un personaje o idea en cuestión de minutos, horas o días: "Aquí pasamos del "Viva el Papa" a "qué extraño el Papa" y luego a "meterse con las castas del Papa", dicho finamente. Carnaval como "caja de resonancia", "Cádiz no cumple años, cumple Carnavales", "todo se transforma", la dignidad en continuo proceso de reconversión, las coplas "igualan, equilibran clases sociales, la playa y el carnaval igualan a la gente, lo mismo que el lenguaje", humor con denominación de origen, "la carga que llevan las palabras" y el énfasis de la risa.

Febrero 10, Cádiz 2012, Diario de Cádiz

viernes, 26 de febrero de 2010

Pereza aterriza en Cádiz

La última esperanza del rocanrol en español, o algo así. Pereza en Cádiz. Flojera en medio mundo. El "dúo de pecadores", como tildaron recientemente a Rubén y Leiva en el diario argentino Clarín, aterrizan esta noche en Cádiz para presentar "Aviones", su disco más reposado, en formato casi acústico, si es que al final los músicos y sus admiradores se resisten a la tentación del ritmo vehemente. Vienen de rejuvenecer a Joaquín Sabina, tremendo triunfo en la Bombonera de Buenos Aires, tiramisú de pasión, y mágico concierto en el Lope de Vega de Madrid, donde tocaron con Ariel Rot, con quien colaboran en su nuevo disco. No paran. Ayer se confirmó la participación de la banda madrileña en el próximo Rock in Río; cantarán el 4 de junio, mientras otro diario de referencia, El País, titulaba "la ternura de los rockeros chelis". Pereza gustan a pijos y macarras, chicas y chicos, niños y mayores, aunque su presuntamente encantadora chulería de barrio, ese toque stoniano que imprimen a guitarras y poses, y acaso su manera de vivir y escribir, también reclutan detractores. Y acumulan galardones, royalties y discos de metal precioso cuando casi nadie despacha discos ni en la tienda de la esquina.
La gira Puro Teatro Rock pasa esta noche por la sala Anfiteatro de Cádiz. Pereza, cara a cara, sin aditamentos ni colorantes. Más de diez años después de su fundación, el grupo madrileño quema etapas a velocidad del rayo, ellos comentan en sus entrevistas que vienen desde abajo, que se lo han currelado hasta tocar la cima y que nadie les regaló nada. Embarcados en un disco de transición, que tal vez dé paso a una época de madurez y de transformación, Pereza se juntaron, allá por el año 99, para hacer versiones de Leño, qué curioso, hasta configurar su particular estilo a base de retazos de Burning, Tequila, Ronaldos, Rolling Stones, Los Rodríguez, Calamaro y otras marcas registradas. Sin olvidar a Sabina, en cuyo último disco participan Rubén y Leiva aportando frescura al repertorio del cantautor, que en América Latina es Dios. Pereza encajaron en el rock en castellano de ida y vuelta, por ello disponen de tantos fans en Argentina, donde veneran su actitud rocanrolera. Hoy se anuncia juerga general en la Bahía: Pereza en Cádiz y Quique González en El Puerto, amigos inseparables, compadres de madrugadas sin fin, cómplices del ritmo y abanderados de la generación de artistas hispanos marcados por el rock anglosajón.
 
Febrero 10, Cultura, Diario de Cádiz

Rocanrol mojoso

Los mohosos, Costus, 1986, el cuadro perdido

Rocanrol mojoso. Balada del tiempo perdido. Una chirigota eléctrica, incandescente, colorista y chic. Cutre y polvorienta. Los monumentos de Cádiz, mrándose a la cara, jugando con el viento. Y señalando al futuro imposible, por ahí queda el porvenir, tó tieso. Tanto olvido después, en lo alto de la punta tecnología, muchas estatuas señalan al horizonte, unos en apariencia triunfal, otros a punto de descubrir la tierra, otros en pos de una razón. Hoy, en los diarios, a diario, los políticos que visitan las obras en señal de propaganda, también señalan al horizonte, nadie sabe si será el mismo horizonte. Todo el mundo sabe que los horizontes perdidos suenan a chirigota eléctrica, y que un cuadro no se puede extraviar así como así. Cogedlo ahí.
Marcel Proust no hubiera perdido el tiempo en Cádiz. Ni Miles Davis, ni Lenny Bruce. Una pizca de novelería, el sonido de la trompeta de fondo a paso lento y algo de humor propio, unas veces entusiasmado, otras melancólico. Los Costus retornaron a Cádiz impregnados de la cosmopolita presunta movida madrileña, que en realidad no fue tal. No existió apenas. Sólo unos cuantos privilegiados crearon el ambiente propicio para "algo" intangible que de seguido encasillaron y empaquetaron los mercaderes de ilusiones. No estuvo mal, duró poco. Los Costus abrieron su casa a los nuevos colores, colmaron la estancia de colores, pintaron lienzos luengos y monumentales, provocaron lo suyo, pero tampoco pudieron vencer la nueva ola de envidias e intrigas y optaron por volver a la Bahía, a un caserón de El Puerto de Santa María donde los cuadros crecieron hasta límites insospechados, techos altos, amplios aposentos, salones con vistas al silencio. Hasta que entró el Carnaval para quedarse. Los Costus vieron algo en la chirigota, un movimiento pop, y la música cobró vida. Tres por cuatro, rocanrol mojoso. Hoy sólo quedan postales de recuerdo. Nadie olvida. Escucha la copla misteriosa, estampas de anteayer, la sospecha y el mosqueo en paradero desconocido.
Odioso e insano deporte, el que lo coja pa él, sin derecho a réplica. Fullero mundo del arte infinito de la picaresca oficial, lastimero canto al pueblo, voces en todo lo alto, espuma blanca en la cresta de la ola, adiós a la inocencia, empujones a la razón, un montadito de desidia y poco más. Suena raro. Se ha perdido un cuadro. Se busca. Javi Osuna no es hombre que se arredre con facilidad, arrió la carná y sembró el deseo de esclarecer una duda gigante. Javi Osuna preguntó una, dos, hasta tres veces por el cuadro, y encontró respuestas huecas, como las escaleras del cielo. Javi Osuna no descansará, sólo pide un cuadro que es de todos, sin segundas, ni terceras. Se suman ahora a su iniciativa un montón de gaditanos, seguidores de lo imposible, amigos de la luz, cada uno de su padre y de su madre. Los Costus ya no están para contarlo, pero pervive su memoria, imágenes rubias y morenas, sonrisas tristes, sombras de la china, folklore diario del corazón. Nadie los olvida. Rompieron moldes, y construyeron universos, no debe ser fácil componer y quebrar a la vez; ellos lo hicieron una y otra vez. A sus obras se remiten hoy los hechos y derechos de personas singulares y plurales, de los trazos de su vida y cuadros extraemos hoy consecuencias, nada fue un error, todo es de color, salvo excepciones.
En Cádiz se pueden perder los papeles. Cádiz es capaz de perder el paso, o de perder pie en agua tapá, sin inmutarse. La oficina mundial de objetos perdidos establece una sucursal en este rincón por imperativo moral, mercadillo ambulante de relojes parados, joyas mentirosas o coches deluxe listos para su desguace virtual. Cádiz pierde años cada año, siempre va por tres mil y pico. A veces pierde oportunidades, aunque nunca pierda la ocasión de callarse. Pero perder un cuadro de Los Costus, y precisamente el de los mojosos, emblemáticos adalides del ritmo y de la humedad reinantes ... home, por favor.

Texto incluido en la web que reivindica la aparición del cuadro y/o depuración de responsabilidades, insólita exposición y manifestación cultural de protesta y tributo, en memoria de los pintores gaditanos. Esta noche se inauguró la muestra artística y a la par abrieron las puertas de la web, un poco de todo, muchas firmas de postín, artistas de categoría y un rocanrol mojoso.

jueves, 25 de febrero de 2010

Confusión

Con razón la ficción ha caído en desgracia. Pillan conduciendo borracho a un político miembro de la comisión de seguridad vial. Pillan en pelotas a un párroco satirón que se gastó en porno el dinero del cepillo. Compran pancartas nuevas para protestar antes de vendernos baratito. Matan a diestro y siniestro en Afganistán, nadie recuerda el "no a la guerra". Desalojan a miles de andaluces residentes vip (viviendas inundables prohibidas), los ríos han perdido la consideración, la naturaleza se cobra parte del olvido. Y piden sacrificios, tenemos "poblemas" estructurales. ¿Y el polítiquillo de los chaquetones que declara tener mil euros en el banco? ¿Y la ministra florero luciendo modelitos de lujo? Por no hablar del periodismo de chubasquero, hasta los webs de tanta noticia anegada, con tres dedos de agua y pocos dedos de frente. Qué pechá de agua. Mucha confusión.

Dayna Kurtz, un diamante en El Puerto

La expresiva y original Dayna Kurtz, cantautora estadounidense muy querida en Europa, se antoja ideal para capear el penúltimo temporal de agua y emociones, cambio de temporada en el teatro Pedro Muñoz Seca de El Puerto de Santa María. Única actuación en Andalucía de la juglar ambulante, de poderosa voz y notable trayectoria discográfica. Ya habitual en la escena española, Dayna Kurtz presenta su más reciente trabajo, "Another black feather", a solas con su propio instrumental, esta vez sin banda de country.
La artista, considerada por los creadores de clichés como la nueva voz estandarte de la música americana, se encuentra de gira por Europa, viene de Grecia, Bélgica, Holanda y Alemania, y cuando consuma la tourné hispana ofrecerá una serie de recitales en Nueva York. Cantautora desde la adolescencia, Dayna conoce las claves y los entresijos verdaderos de la vida "on the road" que plasmó Kerouac y puso en práctica el legendario Woody Guthrie, esto es, girar por el mapa de carreteras del alma, como escribió otro heredero del otro modo de vida americano, Bob Dylan. Durante un tiempo, la cantante viajó por América cantando y vendiendo sus discos mano a mano, así que nadie puede dudar de que se trata de una mujer con muchos kilómetros y más tablas que el JS Elcano. Rodando y actuando, Dayna fue descubierta, como un diamante en bruto, por el folklorista Richie Havens, y también fue reclutada como telonera por artistas como Rufus Wainwright y Anthony & the Johnssons.
Ella practica con absoluta normalidad el eclecticismo: country, jazz, blues, folk, cabaret, ecos de Leonard Cohen, el primer cantante que la hizo llorar en un concierto, y la intensidad, riqueza y plenitud de la música americana. Ni que decir tiene que las inflexiones de voz de la Kurtz carecen de parangón, así como su caudal creativo.

Febrero 10, Cultura, Diario de Cádiz

miércoles, 24 de febrero de 2010

Quique González, con la luna bajo el brazo

Trae la luna bajo el brazo. Un febrero sí y otro no. Quique González vuelve al sur, "conduciendo hacia El Puerto de Santa María", como reza la canción que abandera el último disco del trovador madrileño, "Daiquiri blues". De cómo se miran a la cara la alegría relativa y la melancolía de la luz. Dos años después, con nuevas muescas en su carrera de llanero solitario, entre ellas la memorable grabación en Nashville, la meca de la música vaquera americana, Quique González presenta sus credenciales en la sala Mucho Teatro de El Puerto de Santa María, el rincón de su inspiración. "Esa historia, 'La luna bajo el brazo', se me ocurrió en El Puerto. Y por entonces, hace dos años, empezábamos a tocarla en directo. La primera vez que escribí sobre la provincia de Cádiz fue en Salitre, donde mencioné a Conil de la Frontera. ¿Quién sabe cuál será la próxima". Barbate, seguramente, o Tarifa", comenta entre bormas y veras. "Conozco bien Cádiz. He ido por allí a escribir canciones, más que de vacaciones, a descansar y a componer, más que a tocar. Nunca canté en Cádiz, ésta será la segunda en El Puerto, así que me produce una especial ilusión", señala, no sin antes, reiterar, ante la sorpresa del interlocutor: "Es cierto, voy más a Cádiz a escribir que a tocar, hay una buena onda en el aire ..."
Maestro de los tiempos medios y de los puntos suspensivos (mide las palabras, sus silencios hablan durante las pausas y nunca levanta la voz), González sabe que pilla al sur en plena resaca carnavalera. "Hay verdaderos poetas allí en Cádiz, gente muy buena escribiendo letras y músicas cada año. No me extraña". El músico de Lavapiés llega dispuesto a volcar su fértil creatividad y a devolver al público parte del regalo que ha disfrutado en los últimos años, prestigio, reconocimiento, una trayectoria ascendente, casi siempre en contramano. Es curioso, el frágil mundo lo pasa mal justo cuando a Quique González mejor le va. Agridulces paradojas. El artista, tan sencillo y discreto como siempre, no alardea de su condición, agradece los detalles y sigue su camino. Ahora que casi nadie vende discos, Quique González estrena sello discográfico, Last Tour International en alianza con Sony, y se sale del tiesto.
Hablando de la tierra prometida del country, Nashville, el cantautor eléctrico encuentra palabras luminosas. "Ha sido una experiencia vital y musical tremenda, he aprendido muchas cosas, me ha encantado trabajar con Brad Jones, uno de mis productores favoritos, y con un plantel de músicos extraordinario, y en un lugar con mítica y leyenda, donde han grabado desde Neil Young a Bob Dylan", dos de sus maestros, dicho sea de paso. "Y Johnny Cash. Hemos tocado con músicos que admiro tanto, como Al Perkins, y disfrutado de una ciudad que vive la música las veinticuatro horas del día, así que he vuelto lleno en todos los sentidos, y satisfecho por el nuevo disco. Triple o cuádruple alegría", sostiene. Lo dicho, en contraflecha: la gente enfila la vida cabreada y Quique González tan feliz, por así decirlo. "Nashville, y este disco en concreto, ha sido un regalo, un privilegio para mí, hay que aprovecharlo, asimilarlo y tenerlo presente". Cada noche, en cada concierto, en constante evolución. "No descarto volver a Nashville para grabar", advierte. "Espero poder volver".
La flamante colección de canciones de Quique, que cobran nueva vida en casi tres cuartas partes del espectáculo que el viernes recala en El Puerto, y que está agotando localidades y cosechando elogios y parabienes allá donde se presenta, encaja a la perfección en el rompecabezas González. En el documental anexo al disco se conocen los entresijos del disco. "Grabé las máquetas en formato básico, con guitarra o piano, y en Nashville lo que hicimos fue no desnaturalizarlas, potenciar lo que había, y con tal premisa trabajamos, para que todo saliera de forma natural, con sentido común y sencillez". Raras virtudes, sentido común y sencillez, con razón salió un disco tan redondo y mágico. "No quiero sonar pretencioso, pero se trata de un disco con canciones bonitas, un disco romántico, creo que al final el resultado está mejor que en anteriores ocasiones". Nada que ver con discos precedentes. "Avería y redención", "Kamikaces enamorados" y el resto de la discografía de Quique, cariño colectivo en progresión aritmética a la calidad del producto artístico y emocional. Quique encontró su camino definitivo en su anterior trabajo, o quizá antes, soltando lastre y afirmando su propia personalidad, configurando su particular estilo. De ahí que cuando se le pregunta por su afición a proporcionar aires country a algunas piezas del pasado, o cambiar arreglos de modo travieso al estilo americano, el cantante conteste: "Hay de todo, Daiquiri Blues no es un disco de country, aunque lo haya grabado en Nashville. Es un disco de los míos". Exactamente. Un disco muy suyo.
Quique admite que los nuevos temas suenan diferentes en directo, y que el protagonismo que da a su nuevo disco funciona, "los conciertos no se resienten", todo lo contrario. Y habla de su público.
"Tengo muy buen público. Quizá no sea masivo, pero tengo la inmensa suerte de contar con gente que me sigue desde el principio", hace una docena de años, o que "me ha conocido ahora, buenos aficionados a la música", espectadores inclasificablres, ajenos a tribus urbanas, acaso herederos del público de la edad de oro del pop rock español. A Quique se le encieden los sentidos cuando escucha que él mismo podría figurar entre los herederos de escritores de canciones como los recordados Antonio Vega y Enrique Urquijo, "dos referentes grandísimos para mí; me dedico a la música por gente como ellos. Lástima que este país no respete a sus artistas como debiera, ni a los vivos ni a los muertos. "Es probable", apunta lacónico. Cambio de tercio. "Yo no me puedo quejar en cuanto a respeto del público, me tomo este oficio como una carrera de fondo, me sigue gustando mucho lo que hago, todo un privilegio en estos tiempos, hacer lo que uno quiere".
Un paréntesis para Bob Dylan, a cuento del estreno en España del filme "I'm not there", donde seis actores recrean su azarosa e intrincada vida y obra de un modo muy especial. "Me parece indignante, y muy raro, que estrenen la película con tres años de retraso. Quizá esta tarde vaya a verla". González fue telonero de Dylan en Jaén, nunca lo olvidará.
Viene Quique de acumular sensaciones únicas en el teatro Victoria Eugenia de San Sebastián, "posiblemente el teatro más hermoso donde he tocado. Me despidieron en pie, a teatro lleno, durante un montón de tiempo. Memorable, como otras tantas noches parecidas en esta gira, cuando todo cobra sentido, cuando piensas que todo merece la pena".
El guitarrista Javi Pedreira retorna a la senda de Quique, que lo ha reclutado de nuevo en plena gira. "Ahora la banda suena más compacta que en Sevilla, allí estábamos de rodaje", rubrica, al tiempo que se deshace en piropos al brillante músico: "Javi es de la casa, un músico de nivel mundial y una persona increíble, un fuera de serie, un obrero del rocanrol. Y aporta confianza, seguridad". Y magia. Y la sencillez que busca Quique en la vida y en su obra. "Valoro la sencillez como un virtud".

Febrero 10, Cultura, Diario de Cádiz
La ilustración es de Miguel Guillén

martes, 23 de febrero de 2010

Dos pianistas de postín para el Open Provincia Jazz

El italiano Enrico Pieranunzi, una de las figuras indiscutibles del jazz europeo, y el estadounidense Craig Taborn, una de las sensaciones del teclado moderno, intervendrán en el ciclo musical Open Provincia, que durante el mes de marzo, y con carácter excepcional, se abrirá al jazz, para contrarrestar la pérdida, al menos temporal, de los programas Rising Stars y Campus Jazz Puerto Real. Dos pianistas de altos vuelos, opuestos en sus horizontes creativos pero convergentes en sus conocimientos acerca del jazz y sus derivados. Dos maneras diferentes de entender la música "de negros" que tan bien casa con otros géneros musicales y que se ha expandido por el planeta hasta integrarse en casi todas las culturas. Los pianistas que recalarán en Cádiz en marzo saben mucho acerca de la riqueza que aporta la mezcla de culturas. Un americano y un italiano, en la Bomba.
Si Craig Taborn representa la llegada de aire fresco al jazz, en combinación con otras especialidades, el arte sublime del italiano Pieranunzi carece de rival en el sur de Europa. El americano, que actuará en el aulario La Bomba el día 5 de marzo, emplea también teclados electrónicos, sintetizadores, y es capaz de alternar el jazz de toda la vida con el techno. Pianista inspirado, comenzó a tocar, no obstante, como saxofonista en la James Carter Band. El músico de Detroit procede de la escuela de los años noventa. En cambio, el italiano Enrico Pieranunzi, que tocará el 24 de marzo, también en solitario con su piano, fusiona la música clásica con el jazz. Editó su primer disco en el año 75, ha tocado con Knny Clarcke, Art Farmer, Charlie Haden, Chet Baker y Lee Konitz, entre otros muchos monstruos del jazz americano. Precisamente, reconoce a Baker y Konitz como sus máximas influencias, pese a no ser pianistas. En Italia se le llama "el Bill Evans italiano", un piropo al alcance de muy pocos. Evans, considerado uno de los pianistas de jazz más grandes de la historia, ha contagiado al italiano de cierto gusto por el impresionismo, como lo hizo sobre la obra de Chick Corea o Herbie Hancock.
El Open Provincia Jazz desembarca de la mano del Vicerrectorado de Extensión Universitaria de la UCA en colaboración con la Oficina del Bicentenario de la Diputación Provincial.

Febrero 10, Cultura, Diario de Cádiz

Serrat vuelve a la senda de Miguel Hernández

Serrat, en la tele, cantando en los telediarios, convidando a vino a Buenafuente, reivindicando de nuevo a Miguel Hernández. Milagro, música y poesía en la tele. Ya se escucha el disco en los supermercados, en linda porfía con las ofertas de tres por cuatro y los libros con títulos interminables. Luces y sombras, la palabra, el ritmo, la voz del maestro, mucho por descubrir. Recomiendo la visita al blog del poeta gaditano Luis García Gil.
http://luisgarciagil.blogspot.com/2010/02/serrat-vuelve-hernandez-1.html

Estos días, Luis García Gil actualiza su "Serrat, canción a canción", indispensable análisis de la obra del Nano y complemento perfecto del volumen de letras en el que también colabora el poeta gaditano.

sábado, 20 de febrero de 2010

San Pedro, sieso

Llueve sobre mojado, San Pedro se ha cargao el Carnavá gaditano, se ha suspendido el fin del mundo y una chirigota acuática ha hesho su aguosto, qué grasioso. Fueraparte, han cogío a unos políticos robando, han cerrao dos o tres puticlús de la familia de un torero, dicen que por trata de blancas, como si a las negras las tratasen buenamente. La mayoría de la distinguida clientela, entre quienes se encontraban polis, jueces, concejales, arcardes y abogaos der diablo, pone ahora el grito en el cielo, y la mayoría de quienes ahora aborrecen la explotación de las mushashas antes reían la bromita, totá, por unos cuantos delitos típicos tipificaos hay que ver la gente cómo se pone. Por cierto, pa dar ejemplo, los dueños de tales lugares de hostelería guarrindonga, mayormente vinculados con lo peorcito del sucio negocio del ocio, tenían a sus niños matriculaos en un colegio del opus. Ya se sabe que obras son amores. Se está perdiendo tó: el narcotráfico de postín, el blanqueo de parné por derecho, la esclavitud, las buenas maneras ...

viernes, 19 de febrero de 2010

Conciertos a la vista

La Asociación de la Prensa de Cádiz, el Consorcio del Doce, el Cádiz CF y diversos ayuntamientos de la Bahía preparan importantes espectáculos musicales para los próximos meses, aprovechando la acumulación de conmemoraciones que se vienen encima. El estadio Ramón de Carranza, si se cumplen las previsiones, acogerá de nuevo macroconciertos, ante la falta de un auditorio con capacidad suficiente en la capital gaditana. La Asociación de la Prensa no quiere causar falsas expectativas, tras el forzoso cambio de cartel del pasado año, y camina con pies de plomo en pos del contrato estelar de Alejandro Sanz, con la idea de que el artista madrileño, pero con profundas raíces gaditanas, cante en Carranza el 2 de mayo, precisamente el día de la fiesta de la libertad de expresión. Fuentes de la entidad aseguran que "nada se ha cerrado", aunque confirma las conversaciones con los representantes del cantante. Alcalá de los Gazules, la patria chica de la familia de Sanz, también pugna por traer al artista en el mes de diciembre. Sanz inicia su nueva gira española en mayo.
Más avanzadas parecen las negociaciones entabladas con el legendario cantante senegalés Youssou N'Dour, que actuaría el día 27 de mayo, en lugar aún no determinado, coincidiendo con el Congreso Mundial de Periodismo. Comprometido y polifacético, transmisor del folklore auténtico y también de los nuevos ritmos del mundo, el artista africano brilla con luz propia en la frontera de músicas y colores, colabora con causas tan dignas como Mandela, la Onu o Unicef, y muestra una increíble sabiduría al combinar los cánticos religiosos de su tierra con ritmos afrocubanos, es capaz de hermanar continentes con su voz, y nadie mejor que él para cantar a la libertad de expresión en el planeta. Sería una oportunidad única.
En la febril carrera por lograr contratos de postín, el Cádiz pretende dar lustre a su centenario, albergando espectáculos masivos por primera vez desde 1993, cuando Prince congregó a veinte mil personas en el estadio gaditano. El Consorcio del Doce también trabaja, junto al Ayuntamiento chiclanero y otras instituciones, para traer, por ejemplo, el espectáculo de la MTV latina, sin olvidar otros artistas tanteados por la APC como Joan Manuel Serrat, Concha Buika, Miguel Poveda o el mismísimo Joaquín Sabina, quien estuvo a punto de venir en diciembre a Chiclana. Ahora se reanudan las conversaciones para que el artista jiennense presente su nuevo álbum en julio, quizá en Carranza, tal vez en Chiclana.
La APC, tras el fiasco del pasado año del cartelazo de Sabina, Calamaro y Bunbury, debido a cuestiones de presupuesto, confirma los proyectos pero no garantiza su culminación. Amén de otros factores, la endeble y caprichosa economía de estos tiempos, que no resuelve ayudas y colaboraciones con la facilidad de otras temporadas, mantiene en el aire los contactos, así como la agenda de conciertos de algunos de los artistas mencionados. Lo cierto es que La Pepa, el Cádiz y la Prensa ya se mueven para que suene la música en directo a partir de la primavera. Habrá conciertos de aforo medio y conciertos multitudinarios, el de Alejandro Sanz se antojaría un éxito de público aunque no tan novedoso e interesante como el de Youssou N'Dour y otras figuras musicales.

Febrero 10, Cultura, Diario de Cádiz

miércoles, 17 de febrero de 2010

Toda la culpa es de los bancos

Que suelten la pasta ya !!!
Ni políticos, ni economistas, ni asesores de alto rango, ni sesudos analistas de la cosa pública, ni ejecutivos agresivos, ni los listos de siempre. Nadie había dado con la clave de la salida de la crisis. Exit. Hasta ayer. Parece mentira. El presidente de los autónomos, nuestro líder espiritual, un gachó con la calva peiná de aquella manera, no sé cómo se llama. Hoy habló. Y dijo que la solución pasa por: a) que paguen los ayuntamientos lo que deben. b) que los bancos nos perdonen la vida y concedan créditos ya, que suelten la pasta, por su mare. Hasta los poco duchos en economía sabemos que todo se resume en el punto b. Que aflojen la manteca ya ...
Como cantó la comparsa del G15 estos días, el Gobienno hizo "ajín", los bancos hicieron "ajín" y nunca más se supo.
No me resisto a pensar en las mafias políticas y económicas, en las cajas públicas que financian despidos, en las deudas perdonadas, en las multinacionales que presionan a políticos que se dejan impresionar, en lo que pensaría Rodrigo Rato cuando se largó del Fmi justo a tiempo, en el sube y baja de la bolsa, en las pymes sentenciadas a muerte, en la mafia en general, creo que se llama así algo parecido a lo que se ha convertido el planeta, la tierra grande y la tierra chica. Recesión. Ricos llevándose el parné a Suiza, jueces de ultraderecha hostigando al juez que quiso investigar los crímenes del pasado, ministros huyendo hacia adelante sobre el caballo del marquetín, campañas salvajes contra unos y otros, ahora Zapatero, ahora Guardiola, luego Rajoy, Gallardón, el que se ponga por delante. Unos quieren salvar el cuello de milagro y otros no pararán hasta recuperar el poder político y económico, quiero pensar que pronto todo volverá a ser como antes, como nunca, como algunos han dispuesto o como nos dé la gana, pues, de momento, lo único que nos pueden arrebatar es la pasta, se está comprobando, pero no todo lo demás. O no, Quizá sí, Tal vez estemos equivocados. Ojalá.
Volvamos al Carnaval de la vida, volare, oh, oh, cantare, oh, oh, oh, oh

martes, 16 de febrero de 2010

Los tiempos siguen cambiando

Los tiempos estaban cambiando, o eso parecía, cuando asesinaron a JFK en Dallas. Vaya si cambiaron. Irrumpieron los Beatles, Dylan inventó el rock y ocurrió todo lo demás. La otra noche, Bob Dylan cantó The Times They are a Changing en la Casa Blanca, significativas elección la suya, y actuó junto a artistas como el gran Smokey Robinson o la mismísima Joan Baez, no hay demasiadas noticias concretas, aquí pasó desapercibida la reunión, la información musical no existe en España. Hay información acerca de todo, menos de música. Así que encontramos y leímos las crónicas americanas, por internet captamos alguna foto, en el youtube colgaron ya la canción y poco más. En fin, los tiempos siguen cambiando.
Por cierto, releí esta tarde, en el libro que la revista Mojo dedicó a Dylan, que éste conoció a los Beatles, en persona, cuando los de Liverpool pasaron por los Usa en el 64. Se vieron por segunda vez en Inglaterra. Ahí cambió parte de la historia del rock, pues ambas fuerzas creativas se dejaron influenciar desde entonces y hasta combinaron experiencias sin unirse físicamente. Nunca tocaron en directo, a punto estuvieron de hacerlo en la Isla de Wight, y sus encuentros parece que se distingueron por el caos, el orgullo y la personalidad de Bob y John, principalmente, cierto desdén hacia Mc Cartney y la rica amistad que compartieron Dylan y Harrison hasta la muerte de éste. Ringo nunca pintó mucho, pero ojo: el libro da cuenta del primer porro de los Beatles, a instancias de Dylan. Parece que Ringo no conocía la costumbre de rularlo y se lo fumó enterito, ja, ja. Compruébese en la discografía de los Beatles el giro que dan sus canciones por mor de los efluvios. En otro rincón de la memoria aparece la anécdota de la Isla de Wight, reaparición de Dylan con The Band. El artista se concentró días antes en una finca, junto a amigos como George Harrison, y apareció Lennon, y jugaron al tenis hasta que les pilló el toro y tuvieron que apresurarse, de tal modo que la voz de Dylan suena cansada, no te jode.
Dicen que Dylan odiaba el Sargento Peppers y toda la parafernalia psicodélica, y que una tarde se acercó Mc Cartney a mostrar sus últimos descubrimientos sonoros. Dylan se levantó y cogió la puerta. Por no hablar de la cita en limousine de Dylan con Lennon, hay videos en youtube, una cosa absurda y sobredimensionada, claro, pero también un momento cumbre del surrealismo rock, año 65, camino de la mansión de Lennon. Eran jóvenes, nuevos ricos, estaban cambiando los tiempos. Hoy Dylan, que ha cantado en la Casa Blanca por primera vez, vive cerca de Mc Cartney, en California, no hace mucho que propagaron el rumor de un posible disco a dúo. Pero Dylan, a su bola, se disfrazó de papá noel y montó el belén navideño. Ahora prepara los bártulos, se marcha al Lejano Oriente. Salud.

Carnaval, Cádiz, Montevideo

La foto de Julio González que ilustra la portada del diario oficial uruguayo, el boe ríoplatense, no hace más que estrechar los lazos de unión entre ambos carnavales. La imagen, y la tipografía al más puro estilo Diario de Cádiz, guarda más de diez mil kilómetros de cariño mutuo. Siempre anduvieron a la par los carnavales hermanos, no en vano existen vestigios y pruebas evidentes que atestiguan la vinculación musical entre Montevideo y Cádiz, pero en los últimos años, desde que la comparsa Araka la Kana, de Juan Carlos Aragón, cruzó el charco, no cesan los contactos. Por Montevideo, en clave carnavalesca, también estuvieron Manolo Fossati y Kiki, firmando grandes reportajes, pero esta extraordinaria foto de Julio González oficializa el amor por la fiesta y por cierta manera de entender la vida y el color. ¡Charrúa!

lunes, 15 de febrero de 2010

Campeones de la improvisación

Con la tirria que provoca el ordenador personal a algunos autores, como perverso juguete anónimo capaz de destrozar a una agrupación con comentarios salvajes, curiosa forma de distinguir entre diversas formas de libertad de expresión (todo permitido para mí, cuidaíto con lo que dicen por ahí), tuvo que ser un portátil, precisamente el del bueno de Bustelo, quien diera un poco de juego en la final. Tampoco es pa ponerse así. Aquí nos conformamos ya con cualquier cosa. Un par de cuplés modificados sobre la marcha para epatar al personal, qué arte más grande, Dios mío, lo han escrito y ensayado en diez minutos, en Cádiz hay que mamá, vaya ingenio, qué velocidad de ideas, reflejos, audacia, con el taratachín. Frescura, en definitiva, que agradece la gente, claro, pero que en cierto modo desvirtúa la cuestión e impide escuchar letras escritas y preparadas con reposo y amor a las coplas. Todo el año cavilando, cuatro meses de ensayo y, a la postre, nos sacamos una letrilla de la manga. Campeones de la improvisación. Campeones por los cánticos en la final de la Champions, a este paso van a terminar desempatando las comparsas a penaltis. Campeones del paro, también, y de los proyectos al limbo, y de la sonrisa perfecta. "Hola, Juan, qué alegría, Juan, tequiarcaraho, Juan".
Quedarse en la anécdota hace daño. Un ordenador echando humo, po vale, Monchi principal sospechoso, los grupos rebanándose los sesos durante un mes, y quemando cuerdas vocales a tutiplén, y el publiquito caprichoso y superficial, ajeno y extraño salvo dignas excepciones, alucina con una pamplina que no es de la plaza Mina, sino de Trafalgar Square o de la Sierpes Street. Y, tal vez, no valora el verdadero cuplé de los Santos, que en realidad habla del demonio indomable de los celos y de la revancha ciega del cornudo, un pedazo de letra a la desesperada, donde el despechado personaje se convierte en "destroyer" sin miramientos.
Sensacionales coplas en la sopa de letras de la final, o acaso última semifinal, o según se mire festival triunfal, con más publicidad en la tele que repertorios, documentales en la parabólica, toda la gama de Briole en el tdt; por el mismo precio y casi a las mismas horas, mete Teleteo doce mil "con el Ayuntamieto aro que jí" con hache intercalados.
Migueles ilustró la pelea de gallos en los plenos municipales, nada que ver con la teoría del Doce. El Selu bordó el fin del mundo y cantó de pregonero a pregonero. Los Majaras y los Tangueros coincidieron en la mala educación, problemón para padres y profesores, con el babuchazo virtual como telón de fondo. Pardo estrenó casi todo, y dio en el clavo de Cádiz, esclava de mil dueños sin escrúpulos. Vera Luque, por fin primero, rindió tributo a Aminatou, la dirigente saharaui que permanece vigilada y hostigada por la dictadura marroquí. Pastrana no olvidó a "la mancha de payasos" de la clase política. Los mosquitos trajeron el condón adosao, por si las moscas. Y Antonio Martín cerró la fiesta con una magnífica copla de maestro a maestro, Paco Alba que está en los cielos, para leer entre líneas.
El Carnaval es capaz de frenar el tiempo en seco y de atraer o distanciar a amigos y enemigos íntimos. Nunca se sabe. Comparsistas que hoy no se hablan mañana cantarán juntos, y viceversa.
En la calle aguarda la verdadera frescura, la linda imperfección y un montón de litros por metro cuadrado. San Pedro, no seas más sieso.
Febrero 10, Carnaval, Diario de Cádiz
La foto es de Jesús Marín

sábado, 13 de febrero de 2010

El Selu va en serio

"¿Finales como las de antes? No, por favor, aún recuerdo cuando Los Porculines cantamos a las siete y media de la mañana. No son horas". Horas antes de someterse a la doble emoción, al desdoblamiento de creatividad que este año entraña una final del Falla y el Pregón de San Antonio, El Selu espera a sus hijos, de once y cuatro años, para almorzar. Apenas ha decansado. Recibe felicitaciones y amuletos verbales. A estas alturas, García Cossío, retratista siempre a pie de obra, atípico coplero y guionista del humor con denominación de origen, no se siente más surrealista que el mundo, ni ejerce mayormente el absurdo, más absurdo y disparatado se antoja ahora el planeta. El Selu, en la calle, en las entrevistas, en las actuaciones, obligado a resultar ingenioso, se va por la tangente del hiperrealismo. "Este año, el tipo es puro realismo, pero también surrealista en sí". Y el autor, que esta noche pregona el Carnaval gaditano, un tipo "muy serio y tímido; paso por serio. Es cierto, la gente que nos dedicamos al humor solemos ser discretos, César Cadaval también es tímido, fíjate tú. No se trata de un mecanismo de defensa; es que somos así. Te desdoblas ..."
Repasando su trayectoria carnavalesca como en un flash El Selu confiesa su actual vena costumbrista, lleva unos años en estado de gracia echando mano de estereotipos, revelándose como gran caricaturista, acaso sociólogo de masas, tal vez redentor de penas para todos los públicos. Y recuerda su etapa más revolucionaria, Los Sanmolontropos Verdes, Época Vergüenza, chirigotas nacidas desde la intención de "querer cambiar el tema, dar el cante y, sobre todo, llamar la atención". Eran jóvenes, claro, los chirigoteros, y sabían que el rompedor y desvergonzado estilo inicial, pionero y precursor donde los haya, "sólo podía durar tres o cuatro años. La gente se cansa de todo, se aburre, y la fórmula surrealista tiene fecha de caducidad".
Este año de buenas nuevas "ha sido muy difícil para nosotros, estamos luchando contra Los Enteraos, que fueron muy grandes para la gente y lo más grande que me ha ocurrido en Carnaval. Así que el tipo de Los que no se enteran lo decidí en el acto, nada más concluir la final del año pasado, al día siguiente, tomé la determinación de dar una vuelta completa al personaje. Estas cosas se toman en caliente, es como me gusta trabajar las chirigotas". Confiesa que ya ha perfilado parte de la idea de la chirigota del Once. "Algunas cosas hay". "Los personajes tienen su peso específico; descubrí el filón de Los Enteraos, salió así. Los personajes se descubren tanteando el repertorio, comprobando cómo puede dar de sí, transmito toda la idea al grupo, maduro mucho el proyecto, llevo veinte años haciéndolo, pero cada año que pasa me cuesta la misma vida, me cuesta más esfuerzo. Aunque si me lo quitan, me muero. Lo que me preocupa siempre es cumplir las expectativas", lo que traducido resulta "gustar al público, por encima de la opinión del jurado". Parece un tópico. No lo es. El Selu quiebra algunos esquemas preconcebidos y argumenta otros. Y enfatiza, con todas las de la ley, que todos y cada uno de sus primeros premios, algunos de eloos verdaderos pelotazos, "no se acercan ni por asomo al éxito popular de Los Enteraos. No cambio el tercer premio del año pasado por los triunfos anteriores".
A vueltas con la teoría del personaje perfecto, El Selu piensa en voz alta: "La gente tiene que hacerse con el personaje, aceptarlo poco a poco, metiéndose en él, hasta identificarse con todo lo que cante, enamorarse de él, cogerle el rollo a la medida. No es fácil que la gente responda como tú quieres, recibe la información de momento y actúa en consecuencia". García Cossío, que durante la conversación no cesa de atender a amigos y conocidos, mientras su mente cavila entre las emociones del Falla y el reto de San Antonio, apunta Vera Luque para cerrar su explicación acerca de algo tan intangible como las claves de un personaje carnavalesco, que no suele vivir más allá de unos meses, a veces años enteros. "Vera Luque, este año, lo ha conseguido desde el principio, enganchar a la gente de forma impresionante, lo ha bordado, y a lo largo del concurso se ha ido instituyendo el carácter del personaje hasta cobrar vida entre el público".
Observador nato, y lo que es más importante, hombre que sabe escuchar y profundizar entre las dichas y las desdichas del personal, con el punto de mira en la vida cotidiana, El Selu se topa a veces con la cruda y surrealista realidad. "Un día me vinieron dos marías a preguntarme si ya había decidido el tipo de la chirigota y les repliqué que tuvieran cuidao, que andaba buscando personaje". Un peligro. El Selu, a buen seguro un tipo con rica y amplia vida interior, de lo contrario sería imposible que inventase tantas vidas ajenas, exige del tipo "que tenga coral", mucho eco, y abra la posibilidad de escarbar en su fuero interno, pintar de colores la personalidad que se presenta.
Hete aquí que El Selu, preguntado sobre sus maestros, contesta del tirón: "No tengo maestros. Me he ido haciendo a mí mismo". Se lo ha currado. En Carnaval y en la tele. Con la chirigota y con Los Morancos, "a quienes trasladé esta actitud, esta forma de trabajar, trascendiendo a nivel nacional". De tal guisa que "me resulta mucho más fácil hacer un par de sketchs en una mañana que escribir para la chirigota, escribir dos pasodobles tiene cohone", dice entre bormas y veras. Prueba fehaciente del misterio de las coplas gaditanas. "Aquí sabemos sacarle punta a la vida". Momento preciso en que aparece por la tele la estatua de Marichalar en manos de unos gachós. "Mira, mira, ya no lo quieren ni en el Museo de Cera, pobrecito. De cuplé". Ya no da tiempo. "O sí", tercia parafraseando un latiguillo de su chirigota. "La realidad supera a la ficción". O no. "En Cádiz canalizamos las desgracias por la risa. Aquí hay que ser feliz por cohone, que no se noten las tristezas, ya sabes, la ciudad que sonríe". La vorágine diaria, "las noticias, cada una de ellas peor que la anterior", la bola de nieve, "la espiral de desgracias", apenas asusta a Cádiz. Ni la maldita crisis. "Aquí estamos acostumbrados a jugar en la parte baja de la tabla. La crisis es inherente a los gaditanos. Yo, de hecho, era socio fundador del Inem. Me hacía gracia cuando hablaban de contratos basura: aquí tenemos el síndrome de Diógenes". ¿Y los mileuristas? Aquí hay quinieneuristas, "mejor dicho, milduristas, todavía quedan milduristas". Y hace equilibrios con las palabras, El Selu combina la antigüedad de Cádiz con el Inem, con la edad de jubilación, con mucho arte.
Como El Selu no quiere hablar del pregón, quizá por superstición, seguro que por respeto al público que quiere la primicia, la charla deriva en la frescura de los autores gaditanos a la hora de escribir letras sobre la marcha. "El concurso es como una carrera de fondo, la gente se pone las pilas y no se deja llevar por la primera idea, los autores se miran de reojo, el público es cada vez más delicado y se produce un curioso círculo vicioso, amén de cierta saturación: la gente se ha acostumbrado a que haya gran calidad. A veces se exige demasiado a grupos que no son profesionales, aquí la gente tiene que trabajar y que vivir, Cádiz no es Hollywood". Pero este año llegaron unos famosos de Sevilla causando sensaciones dispares, los Morancos y cía. "Es de agradecer que se hayan tomado tan en serio el concurso, con total respeto. Me consta que estaban temerosos de no quedar a la altura de Cádiz".
El Selu rubrica que el presunto intento de autoeleminarse, por parte de la chirigota sevillana, fue ficticio, y anuncia que los Cadaval, Soto y demás flamantes chirigoteros acompañarán a su agrupación en la calle. "Van a venir con nosotros". García Cossío ha presenciado estos días muestras de cariño y de rechazo hacia la chirigota sevillana. "Como si ser sevillano fuera un delito. Menos mal que han cambiado mucho las cosas. En Sevilla hay mucho age. Paco Lora, por ejemplo, es uno de los tíos más graciosos del mundo". Age, gracia, he ahí el dilema. El Selu conviene en que "los gaditanos nos miramos demasiado el ombligo, humor del bueno hay en todas partes, y malages en Cádiz, tela del telón. Van a Madrid y se llenan la boca de Cádiz, vienen a Cádiz y son de Madrid. Doble personalidad", sostiene El Selu con guasa.
Doble emoción, doble responsabilidad, orgullo por duplicado para García Cossío. Pregón y Final. "El pregón me ha costado sólo en cuanto a tiempo material, pero en cuanto a cariño, ha ido rodado". Con otro lenguaje carnavalesco, acaso hermanado con los guiones televisivos pero con el gaditanismo a flor de piel, el Pregón contará con las chirigotas más legendarias del autor, y otros muchos detalles que se resiste a desvelar. "Lo he podido escribir con más libertad, menos encorsetado que a la hora de hacer una agrupación, pero como diga más cosas voy a romper la magia del Pregón y no quiero". Mejor así. Bastante hemos tenido con la tele, en preliminares, quebrando el factor sorpresa del que se nutre el Carnaval.
Transformado ya el Pregón en una especie de Premio a la Promoción Turística por anticipado, El Selu es consciente de la importancia del acto como difusor de la fiesta señera de Cádiz, pero arguye que el Carnaval ya es suficientemente conocido allende fronteras, más allá de nuestras mentes diminutas. "La gente no se imagina el tirón que tiene el Carnaval en España". Y relata, desde su irreductible humildad, algunos episodios protagonizados por famosos que conocen su obra y confiesan su admiración por su manera de expresarse. Cita a un montón de fieles seguidores de la escuela del Selu: presentadores/as de televisión, cantantes, actores y actrices, humoristas, bailaoras y un futbolista: Gordillo. Recuerda cuando llenaron la mítica sala madrileña Galileo Galilei, templo de cantautores, y no quiere cerrar la charla sin agradecer el homenaje de Vera Luque, "todo un publirreportaje". Y agrega que "no es frecuente que los carnavaleros nos llevemos así y haya tan buen rollo. Vera Luque es un crack". Nobleza obliga, llegan las niñas de El Selu, doble emoción, doble motivo de risa, aunque lo suyo vaya muy en serio.

Febrero 10, Carnaval, Diario de Cádiz

viernes, 12 de febrero de 2010

La máxima expresión de Cádiz

Anda el mundo preocupado por sus cosas, sin dormir, con ojera, sobresaltao. Cádiz no se acuesta, a partir de mañana se cuenta y se canta sus cosas, en asombrosa exhibición de creatividad que antes, en la final de las coplas y del fútbol, se premia. En pocos rincones del mundo se premia ahora la libre expresión. A lo mejor Cádiz no se entera, o a lo peor el mundo no se ha explicao. En la calle nos vamos a enterar de lo que siente la gente, luego del rito del Falla, la máxima expresión de Cádiz.
"Ya verá tú pa aparcá". El fin del mundo, según el Selu. El juicio final, según el Vera. Picotazos de pasión carnavalera a cargo del Sheriff. Y así hasta el infinito semifinal, la última semifinal dejó letras imborrables, golpes de categoría, una muestra de lo que piensan los autores de Carnaval. "Relájate un poquito, Zapatero, que va a acabá con el invento".
Noticias del mundo. La crisis. El hambre en el cubo de la basura, ecos colaterales del ruinazo global,"España iba de maravilla", cantan los Majaras en ilustrativo pasodoble. Y al rato, bajan al sur, "Andalucía, lo nuestro no tiene cura". Nombran presidentes, uno tras otro. "Y en Cádiz, los de siempre". La dignidad, en oferta. Las voces subrayan los versos en rojo. Pedro, comparsa. Vera, chirigota. Noticias de sociedad. Delincuencia juvenil, padres culpables de darlo todo menos cariño, legisladores de la infracultura de tele y botellón. A propósito, elocuente tango argentino al demonio del alcohol. "Ponme otra copita". Palizas y malos tratos. Un cabrón con una copa en la mano. El signo opuesto del hombre que tiende la mano al necesitado, sea de color oscuro o tenga los ojos claros, pero repudia esa parafernalia paradójica y perversa de palomas de guerra y misiles de paz, se tornan las voces "otan no, bases fuera", sin mencionar el extinto cántico, y no alcanzan a entender cómo pueden otorgar un premio de la paz a un país que firma la guerra. Y la hace, y ejerce de tirano cuando se tercia. Política internacional.
Ya en casa, los falsos del Love, que riman con Gómez, piden que cambie el lema de la ciudad que sonríe, pues les duele ya la boca, pero no les duele boca de ironizar con el show business de andar por casa tan en boga durante el concurso de agrupaciones, los recursos actuales del mecanismo de la risa. Y lo clavan: "Ahora todos vienen cargaos de tiestos. ¿Pelota? Pues sacan una pelota. ¿Mojón? Pues sacan un mojón. ¿La prima? Sale una prima. Se han creído que el público es carajote, pa decir carajo haces ajín y te entiende tol mundo". Un canto a la sencillez y a la falta de artificiosidad y a la naturalidad y al humor inteligente.
Esta noche, el fin del mundo, por interné, ya lo predijeron los profetas chirigoteros, llegó la cumbre de letristas y músicos de Cádiz. Antonio Martín, Julio Pardo, Pastrana, Migueles, Bienvenido, Rivas, Braza, Vera Luque, Selu García Cossío, Morera y Gago, y viceversa. Luego, en la calle, la máxima expresión de Cádiz cobrará vida, un milagro, cuando la gente se líe a cantarse sus cosas. Total, son cuatro días cotizables. Ya lo decía la profecía, el 2012 se acaba el mundo, lo que no han dicho es si será por la tarde o por la mañana, que los del Selu tienen que ir a por un papel. El fin del mundo y La Pepa, sensaciones atropellás, dos en uno. "Ya verá tú pa aparcá".

Febrero 10, Carnaval, Diario de Cádiz

jueves, 11 de febrero de 2010

Caña local, caña del país

Sui generis concurso de acreedores, suspensión de pegotes, suben los tipos de interés, baja la bolsa de basura, pasodobles y cuplés en absoluta primicia mundial, ya queda menos pa que cierren Guantánamo. Comando Coñeta. "La Eta no respeta ni que estamos en Carnaval". Los moskitos echan cohone, con las bombas que tiran los julandrones se hacen las dinamarquesas extensiones. Los chrigotarras se van a comer un carajo de la Caleta, subrayan los del Sheriff, cuidaíto con el baygón. Luego, en consecutivo telediario de coplas de actualidad, los Santos dedican una letrilla al notición: los planos, más que los planes, de los etarras. "Vascos". Ya estamos liaos, agravios impulsivos. Los andaluces ya sufrimos musho con el señorito, el yugo y las flechas y demás, tragando orgullo, que es gerundio. Menos mal que la comparsa cierra filas en torno al pueblo pa que no se deje representar por los fanáticos, faltó un pelo pa generalizar, insano deporte fallesco cuando se trata de mirar hacia otro lado. Por ejemplo: hay un canto común contra los nacionalismos, pero se enarbola con pasión la bandera gadita y no hay más linda patria que la chiquita. Las benditas incoherencias. Y la contundencia, cuando viene al caso: políticos trincones, la pérdida de principios y finales, el torpe gobernante que lanza la piedra de la prejubilación y causa estragos entre los escritores de pasodobles. Soldador de Astilleros hasta los 67. Si sobrevive la fábrica sin Gargallo, claro. Los Pelapapas, sin mencionar a Jesús, entona una oda a la memoria y al olvido, al silencio que Cádiz impone cuando se trata de recordar y reconocer a sus héroes de la clase trabajadora. Cádiz, tres mil años de placas, una calle del olvido y ni una placa a los caídos de Astilleros, a los obreros y sus bemoles. Casa la copla de Bocuñano con el pasodoble de los picaítos, donde brotan las pasiones gaditanas y la desidia a la hora de defender derechos y otros menesteres. Fútbol, Semana Santa y Carnaval. El triángulo mágico, el opio del pueblo.
Ojo al toquetazo de los Pelapapas, ilustrativo paralelismo entre el bloque de vecinos y la Piel de Toro, ahora que parecía más difícil gobernar una comunidad. Con imaginación. Convivencia e independencia. Mendigando trabajo. Flojos y señoritos. "En mi casa no hay fronteras, mi mujer domina la lengua oficial y si algún día viene la crisis, será de ansiedad por comprobar que un tipo con cara de tonto puede llegar a la presidencia ... de la comunidad". Zapatero, cogedlo ahí. Los trogloditas del Tino, por sus partes, endiñan cariño a los mantas de la izquierda y los mafias de la derecha. Socorro. Estamos rodeados.
Caña al mono. Cachondeíto con Maradona, armando dobles sentidos en la vía del humor autóctono, stop al canalleo anónimo en internés, odio tras el pc, ratones venenosos, autores vituperados, el coro de Julio Pardo se enfrenta cara a cara con el cobarde navegante, nos vemos en la calle, el reino de la verdad.
Un par de pamplis pa rematar la faena localmente universal. Pepe Blas, el edil más veterano, recibe un cupletazo por parte de los Dirertores, no suele participar en las letras el señor Fernández, experto en marrones en la sombra. Los santos callejeros, mestizos, con aire porteños y cabareteros, en cambio, recurren a la revancha personal y se acuerdan, de muy mala manera, de Subiela. Rencores entre comparsistas que a (casi) nadie interesan. Estilo belénestebanesco que no encaja con la elegancia que se le supone a Bienvenido y cía. Por cierto, señor Google, ¿Subiela va con ese o con zeta? Por si acaso, por las rimas.

Febrero 10, Carnaval, Diario de Cádiz
La foto es de Jesús Marín

miércoles, 10 de febrero de 2010

Mermelada de moralejas

Lo callaíto que se lo tenían. Cobra vida el taratachín con las verdaderas finales; la del viernes será otro sucedáneo, ¡que vuelvan las semifinales de doce horas, joé! En caso contrario, ¡semifinales de ida y vuelta! ¡Y hasta las siete, en diferido, pa prejubilarse a los ochenta y siete!
Pasodoble de la prejubilación, calentito y repleto de golpes consecutivos, al más puro estilo Yuyu, de plena actualidad, Yuyu alienta el dialogo social. "Ahora pa jubilarse te piden dos años más. Yo pido pa Zapatero otros doce o trece años pero dentro de Alcatraz". Pavo real, uh, viva la cotización, whisky de garrafón, bomberos, doctores, actores porno y trapecistas seriamente preocupados, así como otras profesiones de riesgo. Los bomberos, a esa edad, no apagarán ni la luz del cuarto-baño, y los equilibristas no se colgarán ni del youtube. "Me acusan de hacer un canto a la flojera", se confiesan los emires, "y dicen que hace daño". "Po toa esa gente que son tan de trabajar, a joerse otros dos años". Otro repasodoble de gabinete ministerial: "Dicen la gentw que hay crisis, a mí me lo va a contá". Los petrojeques lloran su suerte, están caninos, antes se limpiaban con un billete de quinientos, un binladen, y ahora cagan suelto, van a tener que empeñarlo tó, hasta el yate, ya te pagaré. La copla encierra una significativa metáfora, nos creímos nuevos ricos, íbamos de marajás en pleno burbujazo especulador inmobiliario, y ahora, a joerse. Y joe que te joe, el Psoe, agregan los chirigoteros, piensa quitar los crucifijos y hasta la cruzcampo. Al Yuyu se le ocurren cuplés sobre la marcha, como el de las ochenta mujeres del harén y las ochenta explicaciones. Qué arte hay en Kuwait. La realidad dicta otros mensajes. La comparsa del dinero habla de hipotecas, en hermosa letra, y de "la función indecente" de los aviones sobre la playa. Y Aragón ofrece otra perla en forma de pasodoble filosófico, inconmensurable, de los suyos. "Dios es sólo una inmensa palabra vacía que la gente ha llenado con necesidad". Miedo, tengo miedo, castigo de Dios, que no atiende las llamadas del doliente, ni multiplica los panes y peces pal mendigo, ni defiende al ser humano de los criminales. Dios impotente. "Aquí sólo manda el maldito dinero". $$.
Macroeconomía del disparate global. Crisis del tralará. "Antes se anunciaban audios y ahora filetitos de pollo a 2,40", ironizan los pre-parados. Y las reinas del Pópulo, por aquello de humanizar la lucha obrera y recordar al gran Jesús Gargallo, pinta colores de reconversión en el cielo, entona el "no nos moverán" (no, qué va), y rinde tributo al recordado sindicalista. Luego hace reír con los títeres del pleno municipal, más vale reír que llorar. Eso pensará don Antonio Martín, que además de largar fiestas sobre el terrorismo y demás "ismos" paradójicos hispanos, en letra candente que contiene inspiradas diatribas al fatalismo, el oportunismo, el fanatismo y el falso patriotismo, se chuflea del alargamiento de pene, nada que ver con la ampliación de penas, ni con los desprendimientos de rutinas. Martín, entre bromas y veras, canta a la decadencia de Cádiz, que ya sólo tiene espacio para los cuatro acomodados, y pregunta pa qué queremos dos puentes, en la tierra donde mueren sus astilleros, y la esperanza de trabajo. Cádiz, siempre con lo puesto. La cobardía que consiente, y que siente en copla propia. Cádiz es pa verla. La única patria que reconocen los bohemios, aunque las patrias y las banderas no merezcan una guerra. Si acaso, un pasodoble erguido de orgullo y dignidad. Letras que respiran por las heridas personales y colectivas. Ironías de la vida. Letras sobre la marcha (del fin del mundo). Con moralejas. Las tomas o las dejas.

Febrero 10, Carnaval, Diario de Cádiz
La foto es de Lourdes de Vicente

martes, 9 de febrero de 2010

El rey de la jungla del blues, Eddie Campbell, en El Puerto

El rey de la jungla del blues de Chicago tocará en El Puerto en la noche de Andalucía, 28-F en el Milwaukee, cita muy especial con uno de los máximos exponentes de la música negra surgida del guetto. Eddie C Campbell, que prolongará su gira por varios puntos de España y Lituania, ha tocado con los más grandes del género, posee un estilo dinámico y rompedor, y figura en las enciclopedias de la música negra, amén de ostentar varios títulos como campeón de motociclismo y karate.
El veterano músico americano, nacido en Duncan, Misisipi, en 1939, pertenece a la saga de guitarristas que mantiene viva la llama del blues eléctrico, áspero, desgarrador, urbano y cautivador que los negros cultivaron a mediados de los años cincuenta a la vera del lago Michigan, en época de explosión demográfica y masificación que incubó tanto dolor y expansión, miseria y creatividad. El blues se contagió de gospel y ritmos salvajes, la electricidad tomó los lúgubres garitos de la zona y Campbell, que veneraba al dios Muddy Waters, supo encontrar su sitio. Con la legendaria discográfica Chess como telón de fondo. Desde entonces ha militado en las bandas de Howlin Wolf, Koko Taylor, Jimmy Reed y Willie Dixon, entre otros. Fe precisamente Dixon quien introdujo a Eddie en el ambiente musical y lo dio a conocer en pequeños locales. Campbell se integró en el Chicago West Side Blues a base de riffs hipnóticos y ramalazos de gospel y blues del delta. Décadas después, a sus setenta años, sigue en la brecha y encabeza carteles, como el reciente Chicago Blues Festival, recibiendo el reconocimiento que en determinados momentos hubiese necesitado. El blues no siempre tuvo prestigio en la música popular, no en vano los guitarristas blancos de rock de los años setenta, caso de Eric Clapton y Mike Bloomfield, y algunos grupos señeros como los Rolling Stones, devolvieron la reputación al ritmo y blues hasta convertirlo en el padre de todas las músicas sincopadas. El mismísimo Muddy Waters, caído en desgracia en los años sesenta junto a muchos de sus compañeros, agradeció a Mick Jagger y compañía su promoción del blues. Fue cuando los bluesmen yanquis viajaron a Inglaterra para devolver favores y abrirse paso de nuevo, recuperando el tiempo perdido e influyendo sobremanera en las nuevas generaciones rockeras.
"King of the jungle", el álbum más celebrado de Campbell, sintetiza el arte del guitarrista, que además aporta humor y espectacularidad a sus conciertos. Tras una etapa de residencia en Alemania, Francia y otros países europeos, Campbell retornó en los noventa a su Chicago natal, donde imparte lecciones de ritmo y humanidad. Pero no olvida volar de cuando en vez al viejo continente. El Puerto de Santa María, que ya recibió años atrás a otro rey del blues, acaso el más grande de la historia del género, BB King, se prepara para rendir tributo al rey de la jungla.

Febrero 10, Carnaval, Diario de Cádiz

Camino de la inmolación

Demasiado corazón. Hoy lo que se estila es la frialdad, el desdén, la novelería larsson. Pura pasión literaria y vehemente. Hoy lo que prima es la degradación del lenguaje, y de casi todo lo demás. Letras para escuchar. Comparsas de cariño y de protesta. El mundo cuelga el cartel de "muy frágil" y Cádiz sigue a su aire. Bola de fuego. Ay, qué casualidad, ahora una emergencia nasioná, la gente no respeta ni que estamos en Carnaval. Si tienen un plan de salvación, si están dispuestos a dar un pasito palante (y tres patás), que saquen una chirigota si tienen cohone. Desconfianzas mutuas, desprestigio internacional del tanguillo zamorano, golpecito de estado financiero, letras en el tintero y autores cavilando letras a la velocidad de un telediario, asomados a la teledesgracia. Ya se barrutan letras sobre la anunciada visita de Eta, los planos del viva la Pepa, el horario de los comes. Explosivos pasodobles, sin duda. Cortinitas de humo. También se admiten cuplés, claro, no vamos a pincharle el globo a nadie, pero esos terrotistas becarios, que últimamente no tiran ni petardos ni asustan a las viejas, buscando piso y aparcamiento en Cádiz. Esos chirigotarras, sirviendo de catxondeo y de escarnio, vienen a sumarse a la lista de ajusticiados: politiquillos, banqueros, jueces, policías, ladrones, curas, periodistas, en fin, toa la caterva. Y esa conspiración económica, crisis con fecha de caducidad, la gente no es tonta y sabe que nos quieren comparar con Grecia y Portugal pa robarnos, pa robarnos el Mundial. Cantar por no llorar. Reírse de uno mismo. Conjugue los verbos más baratos. Y, como canta la comparsa de Cheza, arrodíllese, que ha llegado el dinero. Está la cosa muy mal.
La susodicha degradación del lenguaje, que afecta a todo quisque, de momento no ha encendido las alarmas en la surreal academia de la lengua gadita, pero vamos camino de la inmolación, mola la inmolación, quién sabe cómo serán las coplas del 2044, si se entenderán, si alguien escribirá en condiciones, si los mensajes cortos sustituirán a la comunicación oral. Siempre saldrán ratones de biblioteca carnavalesca para escribir y cantar con propiedad. Por cierto, letra en el tintero de los menudos bibliotecarios algecireños. Si la hubiese cantado algún grupo de postín, con firma cotizada, alguien habría puesto el grito en el cielo. Ley del Aborto. Hablan de asesinatos y del voto de celibato, acaso de orfanatos, de leyes laicas, pálpitas y púlpitos sin el poder de antaño. Chiquilla de dieciséis abriles llena de vida y dueña de su cuerpo, "lo diga quien lo diga". Criaturas manoseadas por algunos sacerdotes. Marcadas para toda la vida. Confesionarios y purgatorios, sotana como disfraz y una pregunta que cae como una exhalación: "¿Cuántas jovencitas habéis dejao preñás?" Por supuesto, la santa madre iglesia gaditana sabe que esto es Carnaval, bastante tiene ya, y no se querella por una letra. Va por los guardias mosqueaos, que saquen una chirigota pa contestar. Aquí, aunque parezca mentira, se da por hecho que en Carnaval la gente critica a la autoridad, se mofa de sí misma y arregla el mundo, cada uno a su manera, con letras escritas para escuchar. No sólo en el Falla. Hay que saber escuchar a Cádiz cuando se decide a cantar. En directo y en diferido, en la preliminar y en la final, qué pechá de Carnaval. Por cierto, ¿quién colocó la pancarta del Bernabéu que decía algo así como Kiko, llévanos al Carnaval del Falla? Promoción internacional. Sálvese quien pueda. La reventa en internet. ¿Hay algo más de Carnaval después del Falla? Claro, la Semana Santa, y salen casi los mismos. Arrodíllense.

Febrero 10, Carnaval, Diario de Cádiz
La foto es de Lourdes de Vicente

lunes, 8 de febrero de 2010

De juzgado de guardias

Ya es curioso y/o sintomático que una agrupación luzca una pancarta en el Falla en defensa de la libertad de expresión. Bastaría con cantar. Mala cosa. Precisamente la libertad de expresión, la razón de ser del Carnaval. Está tó encanallao. El mundo al revés. Un sindicato policial denuncia a una chirigota. ¿Quieren mordazas? "Señor juez, buaaaaa, me han llamao fascista". Con la que está cayendo, van a venir con pamplinas de la plaza Mina. Por la misma regla de tres estaríamos todos leyendo el Marca en el trullo. ¿O no? Se está poniendo la cosa querellable e igual de criminal que este cuerdo país de fulleros y cínicos, donde todos tienen un plan ... para hundir al adversario.
Vamos con la libertad de veras, de Vera Luque y compañía. Sensacionales magistrados, por cierto. Pa hacerle un juicio rapidito a algún calimero, por cierto. Y a los politiquillos. El pueblo versus los politiquillos. Si la Justicia anda ciega, no veas Zapatero, que manda soldaditos al infierno. Condenado presidente, mentiroso y embustero, que clamaba "no a la guerra" y ahora se marca el farol de la misión humanitaria. Valiente Zapatero: si tienes narices, manda a Felipito de Borbón a Afganistán, a justificar sus medallas, a mancharse el uniforme. "Adiós, Sofía, adiós, mamá, me voy pa la guerra".
Luego, la versión puntera del "Aquí tienes tu casa, Sevilla", Pura hospitalidad. "Por Sevilla mato". Pa ustedes La Viña, el segundo puente, la alcaldesa. Eso sí. Cuando vayamos a la Feria hispalense, "a ver si me dejan entrar en alguna caseta". Vera Luque canta lo que muchos piensan y no se atreven o no saben cómo decirlo. Vera Luque no cambia por un premio. Es un caso perdío, felizmente.
A vueltas con la internacionalización del concurso de humor y relatos breves, el G-15 estrena una oda a los grupos foráneos, tan vilipendiados ahora que son muchos y tan necesarios antaño. Carnaval sin fronteras, la bandera y el nombre de Cádiz, pasión y peregrinaje, gran enganchaera y las puertas abiertas, por ahora. Pronto llegará la censura y todo lo demás.
Atención, rectificación. El Michael Jackson de los Juanillos, esta vez de paisano, pide perdón en la tele por el bastinazo del otro día, cuando dijo que había aprendido a bailar viendo a Ortega Lara en MQB. "Quise decir Ortega Cano". Elegante manera de ... contar el chiste dos veces, ja, ja. La primera maldad tenía más calidad. Por cierto, se admiten crueldades sobre los proyectos de Eta para Cádiz. ¿Se querellará el chindicato polisiá contra la chirigota etarra por injurias y calumnias? Con las letras del Falla se hacen los polis locatis tirabuzones.
Los desnortaos del Selu, magníficos en la postrera sesión de cuartos, bordan el surrealismo. Sin desperidicio el pasodoble "Han cogío a un político robando". La vuelta de tuerca del humor genuino y universal. Y ya en serio, chapó para el pasodoble haitiano de Los Majaras, rizando el rizo de la propia leyenda de la comparsa portuense: no cantan a los muertos, ni a la lágrima fácil, sino a la solidaridad coplera y a la propia vida. Hay quien, acaso acongojao con el pelotazo portuense, critica su popurrí porque lleva musiquitas legendarias. No, espérate. Así son los popurrís, y lo demás, temas libres. Grande Pedro.
Los Márquez Mateos, en cambio, muestran su originalidad en los cuplés: Berlusconi y el ratoncito Pérez y la coca oculta en plátanos. Y propinan contundentes bimbays a la clase dirigiente mundial, que también se piensa querellar. Tequiyá.
En el silencio de la noche de los tiempos se escucha una voz atiplada: ¡Cai!, que lo resume tó. La cuna de la libertad atemorizá. Qué derroche de imaginación, qué arte más exclusivo. Que nadie calle tu verdad. Ni tu opinión más o menos libre.
 
Febrero 10, Carnaval, Diario de Cádiz

domingo, 7 de febrero de 2010

Cuidaíto con lo que se canta

Todo medido y controlado. Más quisieran los controladores de vuelo. Latidos del corazón, la velocidad del tiempo, números que miden y controlan hasta el compás. Todo excepto el sentimiento, la presunta felicidad y los besos, oh, los incontables besos que recibe Cádiz en estos días de estreno. Qué amor más infinito, vaya exhibición de cariño excesivo. Si los tangueros cuentan letras punteras y cantan cifras humanas, los temas trillados abundan, casi imposible resultar original a estas alturas. ¿Alguien puede explicar cuándo un tema resulta trillado? Algunos intentan sorprender. Otros se dejan llevar por la marea y abusan de los figurantes, del espectáculo interminable de notas al margen del repertorio. La forma sobre el contenido. Salvo extraordinarias excepciones, dignas de verse y escucharse. No sólo en el youtube, ya queda menos pa la calle, dijo el reo.
Hay chirigotas antipáticas y comparsas de risa. Y cumpleaños consecutivos: cien años del Falla, cincuenta de la comparsa, casi un siglo de la señora de la comparsa de Quiñones, otros tantos tacos de la mujer felicitada por doña Teo en el pasodoble de Romero Bey. Copla inédita: los Cupletet aluden al lado más humano de la alcaldesa, por interesarse por la salud de una gaditana olvidada por su familia, en gesto dichoso que según el autor hace olvidar "la arrogancia y soberbia de la rubia alcaldesa". En cambio, la chirigota de la Pasma, al más puro estilo de Aragón, recurre al beso a doña Teo, a la suegra y a esos delincuentes finos: banqueros, jueces, "los del Gobierno". Por sus partes, la chirigota del Remolino recuerda al señor Asná, rimando bigote con carajote, a ver si devuelve los dos kilos de euros que "desvió" el gachó para autohomenajearse colgándose la medalla del sieso manío. Los elfos se muestran orgullosos de su condición de chirigoteros, en contraposición con los rencores entre comparsistas que, precisamente, en la misma sesión, Quiñones pretende desterrar con una linda letra sobre la amistad verdadera. Si los Parapapá lamentan que algunos comparsistas ni se miren a la cara, y que la modalidad se desvirtúe con tanto atrezzo, sin que las letras puedan brillar en todo su esplendor, los de la Caja de Pandora ahuyentan los malos espíritus y aseguran que un amigo no se pierde por un repertorio, ni por grandes auditorios, maldita la copla que arranca un amigo.
Cuidaíto con lo que se dice y canta, no vaya a terminar el chirigotero cantando en una comparsa y cambiando de acera para no saludar a un enemigo íntimo. Remolino es buena gente. Bendito sea el juego reunido de la memoria, la que más se echa de menos, y el repertorio de María la Yerbabuena, siempre al quite, y la sencillez del menos común de los sentidos. Demasiados figurantes, mucho postureo en la hoguera de la vanidad y poco lerele. Una jartá de notas al margen y en lo mejor del querer, ironía interruptus a base de bien. Menos mal que aún quedan detalles gloriosos, cositas simples de la vida, cuplés sobre gorditos o juegos de palabras traviesos y aviesos, a gusto del consumidor.
Al otro lado del camino, en el reducto de la libertad de expresión o así, los autores más serios así escriben alegatos sobre la ley del menor (esfuerzo), la violencia escolar, la mala educación, hasta dónde vamos a llegar, se está perdiendo tó, ya no queda respeto y bla, bla, bla, un montón de verdades juntas al albedrío de quien las ofrece al aire para su inmediata reflexión y digestión. Convendría no alimentar rollos chungos. Milagrito en el Falla, mientras la gente del mundo se enfada con ná. No tocar las narices en exceso, para éso ya están los mercachifles y bufones oficiales. Notas y chuflas al margen.

Febrero 10, Carnaval, Diario de Cádiz